miércoles, 29 de agosto de 2007

El Árbol



La clase de Ciencias Naturales exigía que plantáramos un poroto en un pequeño envase de café y lo observáramos todos los días. Yo había sembrado papas y maíz junto con mi padre, pero ahora esto dependía sólo de mi, por lo que respete al pie de la letra las instrucciones académicas. El resultado fue que el experimento funcionó. Desde el envase brotó algo semejante a una raíz que prontamente generó una hoja. La conclusión era que si uno plantaba y cuidaba correctamente podría ver frutos en el tiempo.

¿Sucedería lo mismo con los árboles ?...

En el patio de nuestra casa había dos sauces y un manzano. Decidí que este número debía aumentar. Comencé con sacar una rama del manzano y así aportar en el futuro para el postre familiar.

El sauce podría generar la sombra necesaria para el verano y un melancólico paisaje en otoño si se distribuía correctamente en la geografía de nuestra casa.

El esforzado y silencioso trabajo dio su fruto, los sauces llegaron a cuatro y los manzanos a dos..., Lo que parecía todo un acierto se convirtió en conflicto.

El manzano creció apestado y los sauces no hacían sino atraer zancudos en el verano. La distribución tampoco era la propicia, algunos muy cerca de la casa, otros en el medio del patio, impidiendo el paso del cordel para colgar la ropa.
La molestia de mi padre era evidente, especialmente porque no había sido consultado. Yo, en tanto, guardaba mi aporte ecológico con cristiano silencio.

Un último intento de mi parte colmó el vaso. Agregar un nuevo sauce que acompañara al manzano más cerca de mi casa.

¡¿Quién ha estado plantando estos árboles?!, indagó molesto un día de verano en que por causa de sus vacaciones tenía tiempo de recorrer el patio. Mi rostro asustado me delató al instante. “Deja de plantar tonteras” sentenció folclóricamente mi padre. La orden fue acatada y tempranamente enterré mis proyectos forestales.

A las clases de Ciencias Naturales, debía sumar otra sobre distribución geográfica

1 comentario:

Eric dijo...

esta muy bueno.
lamento la reprimenda pero la biblia declara que "lo que siembras, cosechas" sembrastes manzanas y te llego un "manzanazo"